El branding en el punto de venta se refiere a la serie de acciones llevadas a cabo por una marca o compañía con relación a la gestión de la misma con el fin de conseguir incrementar las ventas o al menos la atracción del cliente hacia los productos ofrecidos.
Al tratarse de estrategias de marketing llevadas a cabo en el lugar donde los propios clientes acuden a consumir, la clave de este tipo de acciones se basa en la atracción visual, en el uso de envoltorios llamativos o de promociones con un cartel atractivo, o en la colocación de los productos de manera estratégica, entre otras formas de conseguir los objetivos fijados.
A continuación, algunas de las claves del branding en el punto de venta, ¿quieres conocerlas?
¿Qué puedes incluir en tu tienda para mejorarlo?
- Publicidad en el punto de venta (PLV): se trata de una forma muy efectiva de atraer nuevos clientes hacia un producto concreto. Se suele hacer a través de promociones donde determinadas personas se encargan de mostrar el producto en cuestión o simplemente colocando un espacio visual llamativo donde se coloca el producto, así como información referente al mismo.
- Un buen packaging: el envoltorio de un producto es uno de los elementos visuales más llamativos del mismo. Se utiliza para atraer y llamar la atención de los usuarios, así como para informar a éstos acerca de las características principales de dicho producto. Crear un packaging llamativo, cuidado, capaz de atraer positivamente a los clientes potenciales y a conseguir una reacción en estos es una de las estrategias clave de branding en el punto de venta.
- Equipamiento comercial: el mobiliario del propio establecimiento donde se ofrecen los productos es otro de los elementos clave del branding en el punto de venta y es que no solo es una clara representación de nuestro establecimiento y de su estética, sino que se trata de las piezas utilizadas para mostrar los productos. Dentro de este equipamiento comercial que se debe cuidar encontramos las estanterías, los lineales, las cestas y carritos, el escaparate, las cajas y un largo etcétera de elementos decorativos.
¿Qué puedes conseguir si potencias estos aspectos?
Como ocurre con cualquier otra acción de marketing llevada a cabo por una compañía, la implantación de determinadas estrategias y acciones de branding en el punto de venta, trae consigo ligada la consecución de los objetivos corporativos fijados, así como una serie de beneficios, tal como se muestra a continuación.
- Aportar una experiencia al cliente: una de las razones principales por las que se implanta una estrategia de branding en el punto de venta es para diferenciarse de otras compañías que son competencia directa y para conseguir que el público nos recuerde por dichas características exclusivas. Además, otro de los objetivos de estas acciones es conseguir una mejor experiencia a los clientes, con el fin de lograr la fidelización de los mismos.
- Influir en la decisión de compra: la decisión de compra cuenta con componentes subjetivos y psicológicos, de ahí que aspectos como los colores, la tipografía o el diseño general del packaging puedan influir en la misma. Otros aspectos como la colocación de los productos dentro de nuestro campo de visión o en lugares estratégicos del local también pueden influir en la decisión de compra de un artículo u otro.
- Aumentar la calidad percibida por el cliente: un diseño de packaging cuidado, un entorno que guarde coherencia y conexión con el producto y otros aspectos del branding en el punto de venta pueden hacer que los usuarios sientan que el producto que están analizando sea de mayor calidad que otros similares, incrementando así las posibilidades de adquirirlo.
- Aumentar la memorabilidad del producto y marca: además, un diseño elaborado de manera meticulosa, con rasgos atractivos y características y elementos que resulten llamativos para los usuarios, pueden hacer que estos lo recuerden más fácilmente, mejorando así el engagement, la fidelización y consiguiendo de manera sencilla implementar la estrategia boca oreja, ya que los usuarios suelen hablar de aquello que les llama la atención.
Estos son solo algunos de los objetivos que se pueden conseguir al utilizar una estrategia de branding en el punto de venta de manera correcta, pero es posible que haya otras metas que se puedan alcanzar a raíz de estas acciones.
Y tú, ¿has implantado en alguna ocasión este tipo de estrategias? ¿Cuáles han sido los resultados obtenidos?