Las innovaciones tecnológicas, de la mano de la situación vivida a raíz de la pandemia de coronavirus, ha llevado a las empresas a requerir de una inminente transformación digital.
Cada vez son más las compañías que se suman a la digitalización, implantando cambios tales como el teletrabajo, la automatización de determinadas tareas o la formación de los trabajadores para trabajar con nuevas herramientas tecnológicas.
Puede que en un primer momento, llevar a cabo un cambio tan radical pueda dar un poco de vértigo, pero el resultado merece totalmente la pena. Además, dependiendo del punto de partida, es decir, de la situación actual de cada compañía y de los avances digitales con los que ya cuente, el proceso puede llegar a ser más sencillo.
A continuación, algunos de los múltiples beneficios que la transformación digital puede aportar a las empresas, sea cual sea el sector en el que desempeñen sus funciones y sea cual sea el tamaño de la compañía.
¿Qué beneficios trae la digitalización?
- Mejora la comunicación con los clientes: la implantación de nuevas herramientas tecnológicas hace posible que se abran más vías de diálogo entre la compañía y sus clientes, tanto potenciales como finales. Esto permite, a su vez, optimizar la experiencia de usuario y, por ende, mejorar la relación entre los consumidores y la empresa, consiguiendo así incrementar la fidelización.
- Amplía las oportunidades de negocio: al incrementar los medios en los que se presenta la compañía, por ejemplo a través de una página web o creando perfiles corporativos en distintas redes sociales, es posible llegar a un mayor número de clientes potenciales, ampliando las posibilidades de que estos lleguen a convertirse en clientes finales. Además, la presencia digital también hace posible entablar relaciones comerciales con otras empresas y con otros stakeholders, por lo que, una vez más, se ven incrementadas las oportunidades de negocio.
- Reduce costes: la implantación de nuevos canales de comunicación digitales no solo reduce el tiempo de respuesta, mejorando la relación con los consumidores y otros stakeholders, sino que además, esto permite que los costes se vean disminuidos, ya que se requiere de menos tiempo para llevar a cabo una misma actividad. Además, la productividad se ve incrementada, dando como resultado también una reducción de gastos.
- Aumenta el rendimiento de los trabajadores: las innovaciones tecnológicas que se implantan en una empresa tienen como fin facilitar las tareas de los empleados, ayudando a que estas se lleven a cabo de una manera más rápida y eficiente, de ahí que el rendimiento de los mismos sea mayor. Además, los grandes cambios llevados a cabo ayudan a que los trabajadores no pierdan interés por su trabajo, aumentando su motivación. Esto también se consigue gracias a la realización de nuevos cursos de adaptación a estos cambios digitales.
- Se analiza mejor la información: existen determinadas herramientas digitales que facilitan el proceso de análisis de resultados de distintos aspectos dentro de una empresa, ya sea el análisis de los resultados de una estrategia corporativa, el análisis de la respuesta de los consumidores o el estudio de otro tipo de datos relevantes para la empresa.
Pero estas no son las únicas ventajas asociadas a la transformación digital, se pueden enumerar otros muchos beneficios de implantar este tipo de procesos en cualquier tipo de compañía, tales como una mejora en la eficiencia de determinadas tareas automatizadas, un posible incremento en las ventas, una disminución en los tiempos de respuesta a los clientes, lo que a su vez se traduce, una vez más, en una mejor relación con estos, una mejor adaptación al medio y a las nuevas tendencias y, por supuesto, la posibilidad de marcar la diferencia entre el resto de compañías del sector.
¿Entiendes ahora por qué es tan necesario iniciar el proceso de transformación digital en un negocio? En Smart Commerce 21 nos dedicamos a ayudar a todo tipo de empresas a llevar a cabo este cambio tan necesario y podemos ayudarte a iniciar el proceso, ¿te animas a sumarte al futuro?
