El posicionamiento SEO es una herramienta imprescindible para lograr incrementar la captación de nuevos clientes a través de estrategias de contenido digital y, por ende, una parte primordial de la metodología Inbound Marketing, puesto que es la mejor forma de iniciar el proceso del embudo de conversión.
Son múltiples las estrategias que se pueden utilizar en este tipo de marketing pero puede que una de las más desconocidas sea la reutilización de contenidos que, como su propio nombre indica, se basa en el aprovechamiento de temas ya tratados con el fin de actualizarlos o transformarlos en otros formatos.
Esta estrategia nace de la necesidad de mantener, en todo momento, el contenido de una web, de un blog o de un perfil en una red social totalmente actualizado, con el fin de mantenerse relevante en los motores de búsqueda y así mejorar su posicionamiento SEO.
¿En qué consiste reciclar y reutilizar contenidos?
Como ya se ha comentado, reutilizar contenidos no es más que utilizar textos, vídeos, infografías u otros formatos ya publicados y reconvertirlos en algo nuevo y actualizado. Para ello se pueden, simplemente, proporcionar nuevos puntos de vista, cambiar el formato en el que se encuentra volcada la información, añadir nueva información renovada o bien cambiar el contexto en el que se encuentran los datos.
Los contenidos más utilizados en este tipo de estrategias son los posts en blogs, ebooks, vídeos en distintas plataformas, whitepapers, infografías, presentaciones, podcasts o publicaciones en redes sociales.
¿Qué pasos son necesarios para reciclar contenido?
Ahora bien, para reutilizar un contenido de manera correcta es importante seguir una serie de pasos básicos, tal como se puede ver a continuación.
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Primer paso: Actualizar los datos
Una de las acciones principales para conseguir mantenerse relevante y mejorar el posicionamiento en buscadores es disponer de contenido actualizado. Para ello, se deben renovar las imágenes y los vídeos incrustados en posts de blogs o publicaciones de redes sociales, revisar los banners y los call to action visibles en una web o modificar los ejemplos y los títulos por algunos que puedan generar interés en la actualidad. -
Segundo paso: Revisar y actualizar palabras clave
Se debe realizar un análisis de las palabras clave que más funcionan en la actualidad en torno al tema tratado y sustituir aquellas que están desfasadas por otras nuevas que puedan mejorar el posicionamiento. -
Tercer paso: Repasar el texto y los enlaces incluidos
Es importante analizar el formato utilizado para el texto y valorar si se adapta a las nuevas tendencias y, en caso contrario, editarlo.
También es básico probar cada uno de los enlaces, para averiguar si siguen funcionando para si no poder cambiarlos por otros actualizados. -
Cuarto paso: Adaptar el contenidos a distintos formatos
Un texto se puede adaptar a distintos tipos de formatos, en función del objetivo que se desee cumplir. Los principales a tener en cuenta son los podcasts, ebooks, infografías, vídeos y guías. -
Quinto paso: Compartir contenido en redes sociales
Sea cual sea el formato elegido para crear contenido, la mejor manera de compartirlo con el público y conseguir que se viralice es publicarlo en redes sociales. De este modo, no solo llegará a la audiencia directa, sino también a nuevos usuarios.
Esto es tan solo una forma de conseguir reutilizar contenido antiguo y darle una vida para conseguir resultados óptimos, ¿conoces algún otro modo de hacerlo?
